jueves, 25 de agosto de 2011

Hoy me vencí a mí misma... un poquito al menos!!



Hoy hice lo que nunca pensé que iba a hacer ¡en mis cinco sentidos!!! jajaja...


Bailé en Público!!!


Digo, bailar con una pareja en una disco o una fiesta no cuenta... más bien, me paré en un escenario (con otras personas cabe aclarar) para mostrar a nuestro modesto público que habíamos aprendido las bases del "Flamenco" en las tres semanas que duró nuestro curso intensivo.


Enfrenté muchos temores... incluso algunos que me acompañan desde la infancia...


Por disciplina, enfrento mi timidez natural con el mayor aplomo posible, al grado que todos sonríen cuando les manifiesto que yo realmente soy una persona tímida... ¡Temida!! dicen todos y hasta se carcajean, porque les parece en verdad increíble que yo, una persona participativa, que manifiesta sus opiniones aunque sean contrarias a la mayoría y puede pararse frente a un público a exponer un tema, brincar y hasta cantar una canción motivacional, pueda decir que soy tímida!!! ¡pero es cierto!!!, porque no existe timidez cuando tienes seguridad: en tus ideas, en tus convicciones ó en el fruto que dará la conferencia. La timidez sobreviene cuando no estás seguro de lo que haces, o de como te ves, sea porque tienes prejuicios al respecto ó argumentos teóricamente válidos!!


La verdad es que, y con disculpas para mis amigas flamencas, es que ¡a mi no me gustaba el flamenco!!!... ingresé medio a la fuerza, más por obligación moral que por convicción y bueno, la experiencia fue buena!! ahora no sólo me gusta, sino que me interesa y he decidido seguir practicándolo!!: tenía un prejuicio sobre ese estilo danzístico.


Otro prejuicio: ¿a quién le va a interesar verme bailar?? digo... de niños, les interesa a nuestros papás, pero a mis casi 40 años, con mi figura atípica y gestos extraños que suelo utilizar, la verdad, yo siento que me veo fatal!!... pero ahora he aprendido... ¿y que demonios me importa si le gusta o no a alguien como bailo??: No debe importarme!!: me importa a mí, saber moverme, sentir la satisfacción del trabajo de músculos desconocidos, superar los retos de coordinación, aprender a respirar y ¡hasta a contar!, aprender que los pies pueden hacer cinco diferentes sonidos con un sinnúmero de combinaciones ad-infinitum, aprender que las manos por sí mismas son muy expresivas y que las muñecas pueden girar 360°... aprender que puedo estirarme, caminar con estilo y mover las caderas con salero... aprendí a conocerme mejor, lo admito!!


Y el aprendizaje más importante: APRENDÍ QUE PUEDO EQUIVOCARME Y NO SUCEDE NADA... por azahares del destino, no pude ensayar lo suficiente con mis compañeros... aprendí la rutina de pasos en prácticamente 20 minutos y si bien, lo hice medio mal, ¡no estuvo tan "pior"!!! y quizás todos se dieron cuenta, pero ¿realmente a quién le importó??? iban a vernos personas que nos querían!! así que qué mas dió?


He decidido darme la oportunidad de experimentar cosas nuevas y descubrir que quizàs no me conozco lo suficiente como para estar segura sobre qué es lo que quiero... y sobre todo: estoy dispuesta a equivocarme y mejor aún... ¡a no crucificarme a mí misma por ello!!!








No hay comentarios:

Publicar un comentario